Los negocios son los negocios (business is business). Hay ámbitos en los que no valen las medias tintas ni los documentos extraoficiales y cuando se habla de términos jurídicos, financieros o incluso de asuntos relacionados con la investigación, los documentos oficiales son lo primero. Conscientes de ello, en Iuratum queremos que conozcas un poquito más en qué sectores es un requisito contar con una traducción oficial. Después de todo, una traducción certificada te augurará resultados excepcionales en tu desempeño profesional. ¿Quieres conocer mejor por qué? ¡No pierdas detalle a lo que te contamos!

Hay casos en los que una traducción oficial es la única opción de traducción posible. A la hora de presentar un contrato o de remitir una sentencia en otro país, para certificar una patente… son circunstancias en las que pueden requerirse traducciones juradas. Y es conveniente conocer antes en qué situaciones se necesitan para ponerse en contacto con una agencia de traducción jurada de confianza.

Traducción jurada para procesos legales

Los documentos legales son siempre muy delicados. Por ejemplo, cuando uno debe traducir firmas legales, certificados legales, sentencias o cualquier otro tipo de documento que tenga que ver con este ámbito, la traducción oficial es obligatoria. Es más, debido a que se trata de documentos tan delicados, el resultado de la traducción jurada debe ser excelente. En agencias de traducción jurada como Iuratum cuentas con profesionales que darán lo mejor de sí para obtener óptimos resultados.

Traducción oficial para la industria

¿Quién iba a pensar que una simple industria pudiera necesitar de la traducción jurada? Te equivocas si crees que las industrias no requieren estos servicios de traducción. Y es que cuando se trata de marcas comerciales, patentes, contratos, licencias, etc. la traducción jurada de cara a certificar la validez de dichos documentos en el extranjero es imprescindible.

Lo mismo podría suceder con el entorno investigador. Los científicos son de los profesionales que más viajan por motivos laborales. Descubrir un nuevo hallazgo en otro país hace necesario que los documentos que genere el investigador sean traducidos por traductores oficiales al idioma de destino.

El idioma de las finanzas

Por último, los documentos financieros que deban transmitirse a una empresa extranjera o a cualquier administración ubicada en otro país deben abordarse en el idioma de destino. Una pequeña discrepancia en la información de las cuentas con un proveedor podría dar lugar a resultados desastrosos para la empresa. Así que… ¿la mejor opción? ¡La traducción oficial!