Hay algo que no te cuadra en lo que respecta a las traducciones juradas: tienen un precio más elevado que las simples. Si has llegado hasta este post, es porque seguramente te estés preguntando con interrogantes y exclamaciones ¡¿por qué?! No te preocupes, no eres el único. Lo cierto es que el coste de las traducciones juradas puede generar muchas dudas, pero tiene una justificación clara debido a la naturaleza de este tipo de traducción. ¡Sigue leyendo! Te explicamos por qué las traducciones juradas son más caras que las simples.
¿Por qué las traducciones juradas son más caras?
Seguramente ya hayas leído nuestro post ¿Cuánto gana un traductor jurado? Pero tus preguntas ahora van más alla: ¿Por qué son las traducciones juradas más caras?
En líneas generales, la respuesta es sencilla: porque van firmadas y selladas por un traductor jurado convirtiéndolas así en traducciones oficiales con plena validez jurídica. Pero si quieres saber las razones exactas, a continuación, te las contamos:
Formación especializada y acreditación
No todos los traductores pueden realizar traducciones juradas. Para ser traductor jurado, es necesario aprobar un examen y obtener una acreditación oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores. Esta cualificación exige un profundo conocimiento de los idiomas y culturas en las que se trabaja, así como del lenguaje técnico y legal, con el objetivo de garantizar que el documento sea entendible en el sistema jurídico del país de destino. La formación del traductor jurado es muy larga y compleja y el conocimiento se paga.
Sello y firma del traductor jurado
El valor de una traducción jurada también reside en el sello y firma del traductor jurado, que le otorgan carácter oficial y legal. Esto garantiza que el documento traducido es fiel al original y cumple con los requisitos establecidos por las instituciones públicas y privadas. Este procedimiento adicional y la responsabilidad legal que conlleva también se reflejan en el costo.
Tiempo y detalle en el trabajo
Una traducción jurada requiere un trabajo más meticuloso y detallado que una simple. Al ser un documento con validez legal, cualquier error podría invalidar el documento o generar complicaciones en el proceso administrativo. Por este motivo, los traductores jurados dedican más tiempo a revisar y asegurarse de que cada palabra esté correctamente traducida.
Además, los traductores jurados van más allá de traducir todo lo que consta en el original: describen cada marca o detalle del documento y, a menudo, tienen que reproducir el documento del modo más parecido al original, con lo que el tiempo de trabajo es mayor que si solo hubiera que traducir.
Especialización
En muchos casos, los documentos que requieren traducción jurada son de naturaleza jurídica, médica, legal o técnica, lo que añade complejidad al proceso de traducción y demanda una mayor atención a los detalles. Este tipo de texto requiere de conocimientos y habilidades adicionales especializados.
Validez legal y responsabilidad
Una de las razones más importantes del coste más alto es que una traducción jurada tiene validez legal. El trabajo del traductor jurado implica garantizar que la traducción sea completamente fiel y precisa. Además, al firmar y sellar la traducción, el traductor asume una responsabilidad legal sobre la exactitud del contenido.
Los errores pueden tener graves consecuencias legales tanto para el traductor como para el cliente. Por lo tanto, los traductores jurados tienen muchísimo cuidado para garantizar que las traducciones sean precisas.
Más allá de una (simple) traducción simple
El trabajo del traductor oficial va más allá de traducir. No es de extrañar, por tanto, que una traducción jurada sea aproximadamente un 30% más cara que una traducción simple: el traductor jurado da fe de la traducción y certifica su validez, convirtiéndola en una traducción oficial a todos los efectos, gracias a la responsabilidad legal, formación especializada, rigor y detalle que presta. Por ello, está plenamente justificado el precio que una traducción jurada tiene en comparación con una traducción simple.
Ahí lo tienes: la inversión en una traducción jurada garantiza que tu documento será reconocido por las autoridades pertinentes y que no tendrás problemas legales o administrativos en el futuro.
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