Imagina que has decidido irte a vivir a otro país por un tiempo. Durante ese periodo sale una plaza laboral en la Administración. Das el perfil, pero necesitas aportar documentación que acredite que tienes un título académico, entre otras cosas. Es probable que en ese momento entres en pánico, pues tendrás que certificar que el documento, que está en otro lenguaje es real. ¡Tranquilo! Lo que necesitas es una traducción jurada. ¿Sabes cómo encargar una traducción jurada? Te lo contamos en este artículo de Iuratum.
¿Y si estás en Alemania y la agencia de traducción en Barcelona? ¿Deberás coger un vuelo y personarte en la agencia de traducción jurada de Barcelona para hacer el encargo? Para nada. Olvida eso de tener que viajar para completar tu encargo de traducción jurada. En la mayoría de los casos, una agencia de traducción jurada no necesitará ver los documentos originales, aunque también hay excepciones.
Lo primero que tendrás que hacer para encargar una traducción jurada será ponerte en contacto con la agencia de traducción. Un gestor de proyectos te pedirá toda la información necesaria para poder llevar a cabo el encargo, esto es, tipo de documento, a qué idioma necesitas la traducción jurada e incluso te requerirá saber si te urge o no el encargo.
Con el documento en la mano, la agencia de traducción jurada lo cotejará y sacará el número de palabras. De hecho, el coste de una traducción jurada depende del documento y del número de palabras del mismo.
El gestor de proyectos encargará al traductor jurado más idóneo el trabajo y cuando éste lo entregue, se volverá a revisar, al menos ese es el procedimiento que se sigue en Iuratum, por otra persona para comprobar que está correcto. Una vez completado, lo enviará al cliente por correo. Y…¡ya tienes en casa tu traducción jurada lista para presentarla ante cualquier organismo oficial!