Cuando se habla de una traducción oficial, se tiende a pensar que todo lo que hay escrito en el documento es traducible o hay que trasladarlo a otro idioma. Si llega un encargo de traducción jurada de una factura o de un contrato de trabajo, lo más normal es que el traductor profesional deba traducir cualquier palabra del documento, especialmente la letra pequeña o… puede que no.  Aunque no hay normas escritas sobre esto, en Iuratum nos gusta hacer las cosas bien y darte un poquito más de información. Te contamos si en las traducciones oficiales se puede omitir alguna parte de texto a la hora de traducir.

El cliente manda en las traducciones oficiales

Que lo que el cliente dice va a misa es algo que se aprende en cualquier clase de Atención al Cliente y que un traductor jurado debe respetar. No obstante, cuando se trata de traducciones oficiales siempre es recomendable dejarse aconsejar por el experto del idioma.
Supongamos que se debe traducir un título oficial y que el cliente solo quiere trasladar a otro idioma el anverso. Si es lo que el cliente desea, no hay motivos para oponerse a ello, pero también se le deberá informar de que puede que vaya a necesitar las dos partes del documento, con lo que se evitaría tener que solicitar posteriormente y de nuevo esa traducción oficial.
El decidir si se traduce o no todo el documento hay que hablarlo primero con el cliente. Ese será el momento en el que el traductor jurado tendrá que poner las cartas sobre la mesa y explicar si puede o no llevar a cabo el encargo que se le está encomendando.

Contenido omitido en traducciones oficiales

En el caso de que se prevea omitir algún tipo de contenido en las traducciones oficiales, el profesional de la traducción deberá comunicarlo en todo momento. ¿Cómo lo hará? Cuando se realice la certificación de la traducción, ésta deberá incluir una anotación que especifique que se han omitido partes del texto original.

Lo que nunca podrá hacer un traductor jurado profesional será omitir cualquier parte del texto de manera arbitraria y sin especificarlo. En las traducciones oficiales toda explicación es poca. Y sí, se traduce todo, a menos que el cliente pida lo contrario.